Dedicado a mis "amiclientas"

Cuando redactaba mi entrada Cuando lo tengas puesto me llamas, me di cuenta de que no sabía cómo mencionar a esas clientas que al principio llegan como eso, como clientas y que con el paso del tiempo se convierten en algo más, en clientas-amigas.

Dejan conmigo una sensación difícil de expresar pero muy hermosa. Cuando una mujer está en el probador para un bra-Fitting, termina sintiéndose como en un confesionario. A veces llega desanimada porque se siente rara, difícil, mal hecha, que no encuentra lo que necesita porque piensa que no existe y... ¡¡plas!! Se produce la magia: un sujetador a su medida que le encaja a la perfección.

Por eso he decidido llamaros, a vosotras que tanto me dáis amiclienta.