Mi primer sujetador, mi primer blog

Mi primer sujetador, mi primer blog

[Foto catálogo Sk]

Es mi primer blog. Es mi primera entrada. Y puesto que mi sana intención es de contaros cosas sobre el mundo del sujetador, quiero contaros cuál fue mi primera vez: mi primer sujetador.

No, no. Ese sujetador de la foto no fue. Ojalá yo hubiera pillado un sujetador de estos. Recuerdo que el mío era blanco, y es que no podía ser de otro color, claro. No había más. El tejido como de "piqué" o batista. Era lo más común. De algodón, por supuesto.

Esos primeros "botoncillos" que nos asomaban por debajo de la camiseta había que cubrirlos para que se disimularan un poco. Y mi madre, tan orgullosa de que su hija se estuviera haciendo mujer, (esa fue otra que ya contaré) a todas las vecinas las paraba para decirles: "mira mi niiiña... Cucha que cosa más mona. Se me está haciendo una mujer", decía al tiempo que se empeñaba en subirme la camiseta para ver lo bonica que iba su niña.

Encima de que no tenías nada que tapar, te colocaban un trapillo que más que sujetar, era eso, para tapar. Y es que a esa edad, a los 9 o 10 años no tenía nada que sujetar. Y es que yo, aunque intentaba vivir al margen de mi desarrollo, todo a mi alrededor me recordaba que crecía, que ya no me miraban como a una niña.

¡Estira la espalda!
¡Ponte recta!

Eso me decía mi madre ¿Cómo me iba a poner recta si yo pensaba que tenía este mundo y el otro? Yo me encorvaba, me agarraba a los libros como si me los fueran a quitar porque pensaba que todo el mundo estaría pendiente de mis "botoncillos".

¡Ay si yo llego a saber que me iba a quedar con una talla de sujetador 85B...! Otro día os hablaré de tallas de sujetador y copas (lo fundamental lo tenéis en la sección de fitting-bra y talla de sujetador)

Afortunadamente hoy en día los hacen monísimos, con "relleno" y sin él, con un colorido capaz de satisfacer a las más exigentes y por unos precios que no pueden servir de excusa.

Estos sujetadores, llamados "de primera puesta" o de "pollita", los podemos encontrar desde la talla 70 a la 90. Sin aro normalmente y con forma de triángulo o tipo "top" o camiseta.

Consejo: Compra el sujetador crecedero ¿Cómo? Cuando lo compres intenta que se abroche en el tope, donde ya no le puedes ajustar más y de esa forma, conforme vaya creciendo, podrás ir soltando corchetes hasta llegar al primero. Y sobre todo: ¡Que lo elija ella!, si no quieres que se quede en el cajón muerto de risa. Ya sabes que en esa época todas hemos pasado por lo mismo y cuando nos da por una cosa...

¿Y tu primer sujetador cómo era?